El pasado 1 de febrero se puso en marcha el proyecto de Construcción de una escuela infantil en la ciudad de Garango (Burkina Faso), financiada por el Conferenza Episcopale Italiana (CEI), con un objetivo: dar a los niños, incluso a los más pequeños, la oportunidad de crear recuerdos felices y darles la base para continuar su educación.

La ciudad de Garango está situada en la región centro-oriental de Burkina Faso, considerada una de las zonas más pobres del país. Hay numerosos problemas, desde la sanidad hasta la educación, que se ve especialmente afectada por la falta de infraestructuras y la extrema pobreza del país. En los últimos años, el gobierno ha intentado por todos los medios superar esta condición, que también presenta obstáculos de carácter cultural.

Especialmente preocupante es la falta de instalaciones educativas adecuadas para la educación preescolar: los niños de entre 3 y 5 años no reciben la atención y el apoyo adecuados para el aprendizaje elemental. Este es el trasfondo del deseo de Salute e Sviluppo, en colaboración con la Diócesis de Tenkodogo, de construir los cimientos que tanto faltan en un país que los necesita con urgencia.

Tres grandes aulas, una sala de descanso, una sala de administración, instalaciones sanitarias y un comedor escolar darán alojamiento a los 100 niños de entre 3 y 5 añosque se beneficiarán de la construcción de la escuela infantil.

Los educadores que tendrán la tarea de cuidar a los niños serán trabajadores locales que también tendrán una tarea mucho más compleja: concienciar a los adultos sobre el tema de la educación y la escolarización. Uno de los obstáculos encontrados en Burkina Faso en la lucha por la alfabetización es la reticencia de las familias a enviar a sus hijos a la escuela, a veces por la lejanía de las instalaciones, pero también por una mentalidad arraigada que ve a los niños como recursos laborales desde una edad temprana. El proyecto de jardines de infancia pretende desbaratar este sistema e implicar a los padres en las actividades de sus hijos, para hacerles comprender la extrema importancia que tendrá la educación continua en la vida futura de sus hijos.

El deseo profundo del proyecto es crear una conciencia generalque empuje a las nuevas generaciones hacia una mayor educación y una mayor confianza en las instituciones educativas.

Salute e Sviluppolleva a cabo esta iniciativa con la colaboración de la Diócesis de Tenkodogo, socio local, que desde hace años participa en numerosos proyectos destinados a mejorar las condiciones de vida y de educación de las poblaciones de la región centro-oriental de Burkina Faso, dirigiendo centros de enseñanza primaria y secundaria. Además de la diócesis, el proyecto cuenta con el pleno apoyo del Ministerio de Educación de Burkina Faso y del gobernador de la región Centro Este.

Todo este apoyo, incluido el institucional, hace que el proyecto sea una intervención a largo plazo. Los niños, sus padres y las comunidades que rodean a las familias directamente implicadas serán los beneficiarios de un proyecto que pretende seguir siendo una piedra angular de la educación de los más pequeños en esa zona del país. La importancia de la concienciación, y no sólo de la educación de los niños, tiene como objetivo que toda la población esté más concienciada, atenta y cohesionada,preparada para afrontar los nuevos retos que el mundo impone constantemente, especialmente a las nuevas generaciones.

El proyecto tendrá una duración de un año. ¡Le mantendremos informado de los resultados!