No han pasado muchos meses desde que os hablamos de nuestro proyecto Salud y Nutrición para la Población Vulnerable de la Subprefectura de Bossemptélé, que forma parte de la «Iniciativa de Emergencia de Apoyo a la Población Vulnerable en la República Centroafricana» financiada por la Agencia Italiana de Cooperación al Desarrollo (AICS), y cuyo objetivo es mejorar las condiciones de vida de la población de la Subprefectura de Bossemptélé, especialmente castigada por la inestabilidad del país.
La República Centroafricana nunca ha gozado de una tranquilidad que le permitiera crecer y prosperar; al contrario, ha tenido que soportar numerosos golpes de Estado y otros tantos dictadores que, actuando sin escrúpulos, han permitido la explotación de los recursos del país, sin pensar en la cada vez más sacrificada población. La situación en los últimos años ha sido especialmente difícil: los grupos rebeldes se han enfrentado en varias ocasiones a las fuerzas estatales, provocando violencia y muertes, especialmente entre la población más vulnerable.
En este complejo contexto, el Hospital Juan Pablo II desempeñó un papel clave, proporcionando un punto de referencia para la población de la subprefectura. A pesar de los enfrentamientos y la violencia, el hospital siempre ha seguido funcionando y prestando ayuda.
Nuestro proyecto parte del Hospital Juan Pablo II con la intención de aumentar su capacidad para responder adecuadamente a las necesidades y requerimientos de la población. Antes de nuestra intervención, el centro no disponía de una sala de urgencias adecuada para recibir a los pacientes urgentes. Ahora las obras de renovación y ampliación de las instalaciones están casi terminadas y para cuando finalice el proyecto -diciembre de 2022- también está previsto dotar al servicio de urgencias de todo el mobiliario y la maquinaria necesarios.
Otra de las deficiencias encontradas en el hospital se refería al aspecto nutricional: un triple problema si se tiene en cuenta que la mayoría de los pacientes se encuentran en un grave estado de desnutrición en el momento de su ingreso, que la alimentación es necesaria para garantizar un tratamiento y una rehabilitación adecuados, y que la mayoría de los que vienen de los pueblos vecinos, una vez que llegan a la ciudad, no tienen la posibilidad de comprar nada en el mercado local debido a los precios excesivamente altos.
Por estos motivos, se decidió construir un comedor para ofrecer tres comidas completas al día -a base de cereales, carne o pescado- a los pacientes ingresados, que pueden así seguir una dieta correcta y un aporte calórico suficiente para ayudar a su recuperación. El servicio de comedor también se ofrece a los familiares que vienen de lejos y que cuidan de los pacientes más necesitados. Actualmente, se ofrecen más de 2.250 comidas al mes.
Para mejorar la calidad de los servicios del hospital, fue necesario formar a 38 trabajadores sanitarios en activo en disciplinas especializadas como la obstetricia y la oftalmología. Los cursos de formación ya están dando lugar a una mejora significativa del rendimiento de los hospitales.
Uno de los componentes más ambiciosos de nuestra intervención es el refuerzo de los centros médicos situados en los pueblos de los alrededores de Bossemptélé, donde los servicios son casi inexistentes. Gracias al proyecto financiado por la AICS, hemos rehabilitado -o en algunos casos construido desde cero- varios puestos de salud, cada uno de los cuales dispone de un pozo con acceso a agua potable. Las obras están casi terminadas y la población de las aldeas de Gbawi, Bodangui, Bombalou y Yangoro ya tiene acceso a los servicios sanitarios básicos, sin tener que hacer el viaje a la ciudad de Bossemptélé, salvo que sea estrictamente necesario para el tratamiento de enfermedades más complejas.
No sólo el refuerzo cualitativo del hospital y los puestos de salud, sino también un servicio de clínica móvil que, dos veces por semana, visita los pueblos de más difícil acceso, proporcionando tratamiento y educación sanitaria con reuniones de sensibilización sobre prevención y primeros auxilios.
Gracias al apoyo de la AICS, nuestro trabajo en la República Centroafricana ha alcanzado nuevas cotas que esperamos marquen el inicio de una vida mejor para muchas personas que viven en la subprefectura de Bossemptélé.
Este artículo se ha elaborado en el marco del proyecto Salud y Nutrición de la Población Vulnerable de la Subprefectura de Bossemptélé AID 05/RCA/12049/2021 financiado por la Agencia Italiana de Cooperación al Desarrollo. El contenido de esta publicación es responsabilidad exclusiva del autor y no representa necesariamente la opinión de la Agencia Italiana de Cooperación al Desarrollo. La Agencia Italiana de Cooperación al Desarrollo no se hace responsable de la información que se considere errónea, incompleta, inadecuada, difamatoria o de algún modo censurable.